Cada vez más vemos el termino de Accesibilidad Universal relacionado con la discapacidad. En un principio, este termino estaba asociado con la eliminación de barreras físicas que facilitaban el acceso a determinados lugares. Sin embargo, actualmente, gracias al avance y la progresión, hemos convertido este término en un concepto donde la persona y su entorno son un todo. Es decir, hemos progresado hasta conseguir soluciones que no planteen diferencias entre los ciudadanos por sus capacidades.
Esto se ha conseguido gracias a la fabricación e instalación de diferentes alternativas que pueden ser utilizadas por todas las personas, pero que suponen una gran ayuda para aquellas que presentan algún tipo de discapacidad física o movilidad reducida, evitando la exclusión de todas ellas.
Aún seguimos en la búsqueda de un diseño que sea tan flexible que se adopte a las necesidades de cada individuo, pero mientras tanto, en Domya contamos con instrumentos que prácticamente alcanzan ese nivel de adaptación. Nuestros productos de accesibilidad están preparados para facilitar el acceso en las viviendas para discapacitados o personas con movilidad reducida.
Gracias a nuestra tecnología, hemos podido incluir entre nuestros productos: los automatismos, las sillas salvaescaleras, los sistemas inteligentes de domótica, etc. Tratando de adaptar todos los diseños a las necesidades de algunas personas que presenten dificultades físicas y solventando las carencias que presenta la construcción original.
Diferencia entre accesibilidad y usabilidad
Antes de comenzar a hablar en exclusiva sobre la accesibilidad, y todos lo términos que se encuentran relacionados con ella, debemos prestar atención a la diferencia de significado que existe entre estas dos palabras que se van a mencionar reiteradamente.
La usabilidad se refiere a la facilidad de uso, es el grado de eficacia, eficiencia y satisfacción con la que un usuario consigue su objetivo. La usabilidad se compone de atributos cuantificables de forma objetiva, como la eficacia y el numero de errores cometidos durante la acción; y los atributos cuantificables de forma subjetiva, como la satisfacción de uso.
La accesibilidad, por su parte, se refiere a la posibilidad de acceso. Una vivienda podrá ser catalogada como accesible si cada usuario, por muy heterogéneos que sean entre sí puede disfrutar de una excelente calidad de vida. El diseño de esta debe ser creado para eliminar las barreras arquitectónicas para personas con discapacidad física o movilidad reducida.
En conclusión, para que una construcción pueda brindar a estas personas una máxima usabilidad y accesibilidad se debe hacer de forma coherente y coordinada dentro del proceso de diseño, ejecución y mantenimiento de toda la obra.
¿A qué dificultades de accesibilidad se enfrentan?
Las limitaciones físicas de estas personas no les permiten moverse con la misma facilidad de la que no las tiene. Para poder solventar estas limitaciones debemos tener en cuenta cuáles son las dificultades. Sin embargo, antes tenemos que diferenciar entre desplazamiento (horizontal y vertical) y el uso (preparación y ejecución).
Dentro del primero que hemos mencionado, surgen dos inconvenientes: la maniobra que generalmente se dificulta por la falta de espacio y el cambio de nivel, ya que les supone un esfuerzo extra, o en el caso de las sillas de ruedas, es una acción prácticamente imposible.
Respecto al uso, las dificultades que se dan son el alcance, es decir, la limitación para llegar a objetivos y el control, lo que lleva a la pérdida de capacidad de realizar acciones o movimientos de forma precisa.
Si estos términos los trasladamos al ámbito comunitario, podemos ver que estos espacios se convierten en muros infranqueables para estas personas. Esto es porque afectan a espacios donde la modificación es una tarea ardúa, porque requieren de la aprobación por parte de los propietarios (en caso de tratarse de una vivienda plurifamiliar) y porque es un coste extra, entre otras cosas.
La seguridad en la Accesibilidad Universal
La seguridad es una de las características principales de la accesibilidad. Más bien, se podría decir que esta última no existiría sin la primera, pues algo que no es seguro no es accesible. Por ello, los productos deben garantizar la seguridad de su uso para todas las personas.
Para conseguir una seguridad total debemos tener en cuenta que se debe aplicar en cuatro aspectos:
- Vías de acceso. Se deben evitar los niveles puntuales como los bordillos, y sustituirlos por una ligera pendiente.
- Vías de evacuación. En numerosas ocasiones hemos podido comprobar que los edificios que cuentan con una puerta para salida de emergencia, a esta le siguen innumerables escaleras, dando por hecho la homogeneidad de las personas. Esto se puede solucionar con la construcción de refugios en lugares seguros.
- Dispositivos de control o filtro de acceso. Son barreras físicas que se convierten a su vez en barreras a la accesibilidad, un problema que debe ser solventado.
- Dispositivos especiales. Se refiere a todos los elementos más específicos que mejoran la accesibilidad, como las plataformas elevadoras, las sillas salvaescalera, etc.
Normativa de Accesibilidad Universal
La normativa sobre la accesibilidad en España que recoge las acciones de accesibilidad exigibles a los proyectos de edificación se encuentra en el Código Técnico de la Edificación (CTE) y a su documento adjunto Seguridad de Utilización y Accesibilidad, publicado en el Real Decreto 173/2010, de 19 de febrero.
Desde el 12 de septiembre de 2010 los proyectos lo deben de cumplir de forma obligada. Las condiciones de accesibilidad fueron presentadas por un grupo formado por representantes del Comité Español de Ayudas Técnicas y el Consejo Nacional de la Discapacidad.
Soluciones de accesibilidad Domya:
- Puerta automática para el portal.
Son puertas batientes para comunidades de vecinos que tienen la capacidad de adaptarse a cualquier portal, siempre cumpliendo con la Ley de Accesibilidad Universal. Domya cuenta con una amplia variedad de automatismos para eliminar las barreras arquitectónicas de una puerta convencional.
- Puerta automática para minusválidos.
Construidas con materiales de alta calidad, que permiten un aislamiento térmico y acústico. Las puertas automáticas de Aprimatic son la mejor opción y el coste de mantenimiento es bajo. En Domya nos preocupamos por una accesibilidad universal, por lo que las puertas automáticas presentan diferentes características según se requiera: doble hoja móvil, hojas telescópicas, hojas de grandes dimensiones, etc.
- Automatismos para persianas.
En Domya sabemos la importancia de aprovechar la tecnología para instalarla en el hogar y mejorar la usabilidad de los elementos de la casa para personas con dificultades físicas. Por eso, instalamos motores tubulares para persianas que permiten su movimiento vertical gracias a un mando o un interruptor.
- Centralización mediante hilo piloto.
Permite controlar tanto la luz artificial de la casa como la luz natural a través de las persianas. Un único piloto conecta a todos los módulos previstos, lo que permite la regulación de la luz a través de un único mando, con un pulsador individual o doble. Es una solución práctica y económica para las personas y fundamental para aquellas con movilidad reducida.
En Domya disponemos tecnológicas y avanzadas soluciones para facilitar el acceso a discapacitados y a personas con movilidad reducida. Todos nuestros productos cumplen con la Ley de Discapacidad Universal y destacan por la seguridad, calidad y precio.
Para más información puede ponerse en contacto con nosotros en info@domya.es
